Cómo integrar la cultura del otro sin perder la mía.

Cómo integrar la cultura del otro sin perder la mía.

Convivir con otras culturas nos permite evolucionar.

Irme a vivir a un país extranjero es de las experiencias con las que más he disfrutado al entrar en la edad adulta. La aventura, la novedad, las experiencias, los descubrimientos, las oportunidades de nuevas relaciones, daban una sensación desconocida de libertad, la que va asociada a los primeros pasos fuera del nido familiar.

En todas mis experiencias, han prevalecido unos elementos importantes a la hora de poderme integrar. Era importante tener un nivel de idioma mínimo para poder comunicarme y así crear un vínculo con otras personas. Día tras día, al vivir mi nuevo cotidiano junto a estas personas, se desarrollaba una relación en la cual me sentía incluida y acogida. Al principio todo es nuevo y es importante estar muy abierta, tomar el tiempo de descubrir los platos típicos, entender porque se hacen las cosas de otra manera, conocer las formas de relacionarse, los valores que son compartidos por la población de este país, vivir de lleno la experiencia para poder formarse una idea y luego adaptarse sin perderse.

Encontrar este equilibrio es esencial para poder vivir a gusto en otro país, sobre todo si la estancia es a largo plazo.

Pensando en mi historia personal y como hemos creado nuestra relación con mi marido, hay varios elementos importantes para conseguirlo.

Primero es importante tener respeto para el otro, y también para sí mismo. Es decir que si algún aspecto de la otra cultura me incómoda, no tengo porque seguirlo, o poner límites. Este aspecto va de la mano con las ganas de compartir: la persona que llega a la vez que hace esfuerzos para integrarse, trae consigo unos rasgos culturales que se pueden integrar en las rutinas, creando así una nueva cultura propia de esta familia.

A la llegada de nuestros hijos, también hemos cambiado nuestros horarios por unos más europeos. El idioma, rasgo prevalente de una cultura, también se invita a nuestra casa y conviven con toda normalidad 3 idiomas a la hora de relacionarnos: el catalán, el castellano, y el francés.

En cuanto a rituales, conviven las creencias de Papa Noël y de los Reyes magos; elaboramos monas de Pascua y también pasan las campanas por el jardín dejando chocolate escondido…

La Importancia del Coaching Familiar en Relaciones Biculturales.

En nuestra experiencia, tanto mi pareja como yo hemos evolucionado significativamente gracias a nuestra relación bicultural. Esta evolución se refleja en diversas cualidades personales clave:

Comunicación Efectiva

La comunicación es esencial en una relación bicultural, ya que las diferencias culturales pueden llevar a malinterpretaciones. Aprender a comunicar eficazmente nos ha permitido superar estas barreras.

Aceptación y Negociación

Aceptar al otro con sus diferencias y negociar para encontrar un terreno común son habilidades cruciales. Estar atentos a las necesidades de la otra persona y enfocarnos en lo positivo de cada cultura nos ha ayudado a sobrellevar las dificultades de la vida y a inventar nuestra propia manera de vivir.

Enriquecimiento Cultural

Compartir rituales culturales, culinarios e idiomáticos nos ha traído una riqueza excepcional. Mantener vivos estos aspectos de nuestras culturas nos hace sentir incluidos y nos permite transmitir estos valores a nuestros hijos.

La Evolución Familiar con la Llegada de Nuestros Hijos

La culminación de nuestra evolución bicultural se da con la llegada de nuestros hijos. Ellos llevan en su ADN las particularidades de ambas culturas, hablan varios idiomas sin cuestionar esta habilidad y se sienten a gusto tanto en un país como en el otro. Este enriquecimiento cultural les permite dominar los rasgos culturales y beneficiarse de nuestras historias de vida.

Mantener la Cultura Viva

Para mí, tener presentes estos aspectos culturales en mi vida es crucial. Me permite sentirme incluida y transmitir estas tradiciones a mis hijos. Mantener viva mi cultura en otro país me ayuda a estar a gusto y evita que me deje llevar por la nostalgia.

Qué Aprendí de Esta Experiencia

La Aceptación es Clave

La aceptación es fundamental para crear algo nuevo. Aceptar otra cultura, aceptar a la otra persona con sus diferencias, sus necesidades y, sobre todo, aceptarme a mí misma ha sido vital. Compartir con otra cultura ha ampliado mi conocimiento de quién soy y lo que quiero transmitir.

El Valor del Coaching Familiar

El coaching familiar juega un papel crucial en ayudar a las familias a navegar estas complejidades culturales y emocionales. Un coach familiar puede proporcionar herramientas y estrategias para mejorar la comunicación, fomentar la aceptación y fortalecer los vínculos familiares.

Beneficios del Coaching Familiar

  • Mejora la comunicación: Ayuda a las familias a comunicarse de manera más efectiva, reduciendo malentendidos.
  • Fomenta la aceptación: Promueve la comprensión y la aceptación de las diferencias culturales.
  • Desarrollo personal: Apoya el crecimiento y desarrollo personal de cada miembro de la familia.
  • Fortalecimiento de vínculos: Ayuda a crear una base sólida de amor y respeto mutuo.

Cómo Iniciar con el Coaching Familiar

Si estás interesado en coaching familiar para mejorar las relaciones en tu hogar, no dudes en contactarme. Ofrezco sesiones personalizadas que se adaptan a las necesidades únicas de tu familia. Estoy aquí para ayudarte a construir una familia más fuerte y unida.